VIDA DIARIA
LIC. ROSA ELENA GONZALEZ HERNANDEZ
Bien por ella…
Tomó protesta como vicepresidenta del Senado una Tamaulipeca, IMELDA SANMIGUEL SANCHEZ, y lo real, más allá de colores, es bueno que una mujer de tierras cuerudas alcance esa distinción.
Aclaro, a la Senadora no la conozco en persona, jamás he cruzado palabra con ella, supe de su existencia por su incursión en la política. Cuando SANMIGUEL SANCHEZ era diputada local me enteré de un triste episodio de su vida, y la verdad, su historia de resiliencia es para aplaudirse.
Más cuando en esa resiliencia se reinventa, se abre el corazón y la razón. En lo personal causo buena impresión cuando se supo que, la entonces diputada, era una mujer sensible, que decidió hacer su solicitud para adoptar una niña, realizo todo el trámite correspondiente y luego de los estudios califico para adoptar, le dieron en adopción una pequeñita de nombre NATALIA con la que inmediatamente conecto y se comprometió a cuidarla, protegerla, cambiarle la vida.
Por lo que se ve en sus intervenciones en el Senado, la propiedad con la cual se conduce, se deduce que IMELDA SANMIGUEL es una mujer inteligente, preparada, con buena presencia, que, a pesar de los infundios de adversarios, que nunca faltan, ella se ha conducido con honestidad. Se buscó y no se encontró nada que manche su imagen. Y por información de conocidos en común nos enteramos que es una persona que supo sacar del dolor las fuerzas para salir adelante, enfrentar retos, emprender proyectos y encontrar el más puro amor, el de su hija.
Ella es Arquitecta y perito valuador, luego de su titulación se fue a España a cursar una especialidad en arquitectura, en ese tiempo tenía un novio con el cual platicaban todos los días vía telefónica al medio día, por ahí de las 2 a las 4 de la tarde.
Un mal día ella, IMELDA, se quedó esperando una llamada que no llego. Habían quedado, luego de platicar un rato, reanudar la conversaron vía telefónica España-Nuevo Laredo, pues ella prepararía un trabajo que entregaría en el Instituto educativo, y él saldría a comprar algo para comer, pero la fatalidad al novio alcanzo, un incidente la vida le arrebato.
De esos golpes de la vida en ocasiones la gente no se recupera tan fácil, el dolor es grande pero el tiempo y apoyo familiar logran poner a las personas de pie, con la convicción de seguir adelante por ella, sus padres y familiares principalmente, hoy IMELDA está de pie, se ve que emocionalmente está bien y políticamente lleva buen paso.
Es hija de político, seguramente fue su inspiración al momento que se interesó por ese quehacer que ejerce no para lucrar como muchos lo han hecho, ella no tenía la necesidad, su economía era estable, pero necesitaba una buena razón para continuar su vida y trabajar para bien de la gente, la verdad lo hace bien.
Ahora es Senadora, tomo protesta como vicepresidenta en el Senado, Tamaulipas con ella está bien representado en la Cámara Alta pues más allá de colores IMELDA le apuesta al trabajo para bien de todos, a la urbanidad política.
Su motor es su familia, sus padres y su niña a la cual ama como si hubiera nacido de sus entrañas, en las fotografías que aparecen en redes sociales se ve una comunión entre ellas, lazo fuerte entre madre e hija.
Bien por ellas, una por tener el corazón de apostarle a la adopción y la otra por que DIOS le puso en el camino la madre que necesitaba. Seguramente seguirán creciendo juntas, ambas se necesitan y ahora son complemento.
No, hay duda de que IMELDA seguirá dando de que hablar por su trayectoria política, pero también es bueno saber que es una persona con un corazón lleno de amor, una mujer que supo convertir el dolor en pasión por lo que hace. Bien por ella.
