VIDA DIARIA
LIC. ROSA ELENA GONZALEZ HERNANDEZ
Mañana es el día…
Mañana 8 de septiembre, se celebra el Día Internacional del Periodista y es triste darse cuenta que cada vez es más difícil ejercer la profesión en el mundo, en México no se cantan mal las rancheras.
De hecho, y aunque duela decirlo, México está considerado como uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo crítico, ese que incomoda a encumbrados de los poderes oficiales o facticos que tienen algo, o mucho que ocultar.
No lo decimos nosotros, las estadísticas de asesinatos a quienes se dedicaron a escribir o dar noticias en los diversos medios de comunicación así lo marcan, hasta la Organización de las Naciones Unidas ha declarado que nuestro México es el país más peligroso para ejercer la actividad periodística en los últimos tiempos.
Los informes que publica la Campaña Emblema de Prensa, una organización no gubernamental con estatuto consultivo en la ONU, siguen ubicando a nuestro país como el más peligroso del mundo para ejercer el periodismo, con todo y que ahora existe una dichosa ley de protección a periodistas que la verdad no se ve para qué demonios sirve.
“Es inquietante la situación, no solo en México, sino en América Latina”, dice la Campaña Emblema de Prensa al asegurar que muchos periodistas han perdido la vida y muchos medios de comunicación han recibido amenazas y hasta se han concretado ataques directos en sus instalaciones.
Aun así, el periodista en nuestro país sale valientemente a las calles, a enfrentar la vida y sus vicisitudes, empuñando sus armas que no son más que una grabadora, cámara, libreta, bolígrafo, celulares y la tecnología que se tiene al alcance para realizar con mayor eficiencia el trabajo, porque el reportero está consciente que la sociedad requiere informarse, que es necesario mantener al pueblo al tanto de los acontecimientos.
Cierto, hay situaciones difíciles de abordar porque en nuestro país a pesar de que ya se tiene una ley para proteger a los periodistas la verdad es que las condiciones no están dadas para hablar con toda la libertad que se requiere, se tiene temor.
Sin estar en los zapatos de quienes informan, hay que decir que muchas veces el periodista es incomprendido y hay ocasiones que le llaman cobarde, pero lo cierto es que además de informar también se tiene que cuidar la integridad física y de las familias.
La prensa, los medios de comunicación, son elementos necesarios
en una sociedad moderna y democrática, el comunicador, aunque algunos gobernantes o encumbrados políticos no lo quieran ver de esa manera, es parte del engranaje de un sistema, el vínculo entre pueblo y gobierno. ¿Cuándo se tendrán en nuestro país verdaderamente las garantías necesarias para hacer un buen periodismo?, no lo sabemos, pero ojalá pronto suceda ya que es por el bien de todos.
Urge que a lo largo y ancho de este México lindo y querido se tengan garantías para informar cómo se debe, es necesario porque el pueblo lo requiere y así poder quitar la mala etiqueta de los comunicadores, porque lamentablemente los sondeos de opinión ponen a los periodistas solo un paso adelante de los políticos y un paso atrás de los cultos religiosos en lo referente a la credibilidad, es necesario ser mejores para que la sociedad distinga que ya no es posible que por culpa de unos la lleven todos.
Un periodista es aquella persona que se dedica profesionalmente al periodismo en cualquiera de sus formas, ya sea en la prensa escrita, radio, televisión, o medios digitales, su trabajo consiste en informar, descubrir e investigar, sin quererse sentir juez, temas de interés colectivo.
En fin, la situación es que mañana 8 de septiembre es El Día Internacional del Periodista, seguramente pasara desapercibido pues en nuestro país se recuerda y celebra el 4 de enero. Pero igual desde hoy va la felicitación para todos los periodistas de Ciudad Victoria, Tamaulipas, México y el mundo.